Hola amig@s el Falafel es una preparación similar a una albóndiga o croqueta pero elaborado con una base de garbanzos o de otra legumbre y que es originaria de Oriente medio. Una receta sencilla de preparar y que resulta deliciosa. Te animo a probarla.
INGREDIENTES:
1/2 kilo de garbanzos
4/5 ajos
2 cebollas medianas
1 sobre de levadura
Pimienta blanca
2 cucharadas de comino (opcional)
Perejil
Sal
Aceite virgen extra
Cilantro (opcional)
2 huevos
Harina de garbanzo
PREPARACIÓN:
Ponemos los garbanzos en remojo 24h antes de preparar la masa. Hay que controlar que durante este tiempo no se queden sin agua, ya que durante las primeras horas absorben bastante agua, así que controlar que estén siempre bien cubiertos. Debemos usar unos buenos garbanzos lechosos y jamás garbanzos de bote que ya vienen cocidos, ya que no quedarían igual las falafel.
Pasado el tiempo, escurrimos los garbanzos y colocamos sobre un papel absorbente o sobre un trapo de cocina ya que hay que conseguir que pierdan todo el agua, cuanto más secos estén mejor.
Una vez los tengamos bien secos, vamos a picarlos con ayuda de un robot de cocina, de forma que nos queden en trozos pequeños sin llegar a triturarlos completamente. A medida que vamos triturando vamos incorporándolos en un bol.
Picamos la cebolla quitándole la capa exterior, y la cortamos en trozos y la añadimos a la picadora. Los ajos los pelamos y quitamos le corazón y lo añadimos también a la picadora junto as la cebolla. Lavamos una buena cantidad de perejil y cilantro, los escurrimos y los añadimos junto al ajo y la cebolla. Picamos todos los ingredientes con el robot de cocina hasta que queden bien picaditos, y los agregamos al bol donde tenemos reservados los garbanzos.
Agregamos sal y pimienta recién molida, un par de cucharadas de comino molido y 1 sobre de levadura y removemos lo mejor posible para mezclar todos los ingredientes. La mejor forma de hacerlo bien es empleando las manos directamente, ya que así conseguiremos una masa homogénea.
Una vez hayamos amasado lo mejor posible, tapamos y reservamos en la nevera de 45 minutos y 1 hora.
Una vez la masa haya reposado y la levadura hecho su efecto, vamos a proceder a formar las falafel.
Hacemos unas bolas no demasiado grandes, como si fueran croquetas.
Batimos los huevos con ayuda de una varilla de cocina y colocamos en un plato hondo. En otro plato colocamos unas cucharadas de harina de garbanzo. Vamos pasando por huevo y por harina las bolas de falafel y las aplastamos con las manos.
Ponemos abundante aceite en una sartén a calentar y vamos añadiendo las falafel hasta que estén doradas por ambos lados, para escurrir el exceso de aceite las colocamos sobre un papel absorbente o servilleta.
Este plato podemos acompañarlo de alguna salsa como por ejemplo de Yogurt, Tzatziki, Tahini, Hummus o bien dentro de un pan acompañado de tomate, lechuga y alguna salsita a nuestro gusto. Espero que os guste.
¡ Buen provecho !
INGREDIENTES:
1/2 kilo de garbanzos
4/5 ajos
2 cebollas medianas
1 sobre de levadura
Pimienta blanca
2 cucharadas de comino (opcional)
Perejil
Sal
Aceite virgen extra
Cilantro (opcional)
2 huevos
Harina de garbanzo
PREPARACIÓN:
Ponemos los garbanzos en remojo 24h antes de preparar la masa. Hay que controlar que durante este tiempo no se queden sin agua, ya que durante las primeras horas absorben bastante agua, así que controlar que estén siempre bien cubiertos. Debemos usar unos buenos garbanzos lechosos y jamás garbanzos de bote que ya vienen cocidos, ya que no quedarían igual las falafel.
Pasado el tiempo, escurrimos los garbanzos y colocamos sobre un papel absorbente o sobre un trapo de cocina ya que hay que conseguir que pierdan todo el agua, cuanto más secos estén mejor.
Una vez los tengamos bien secos, vamos a picarlos con ayuda de un robot de cocina, de forma que nos queden en trozos pequeños sin llegar a triturarlos completamente. A medida que vamos triturando vamos incorporándolos en un bol.
Picamos la cebolla quitándole la capa exterior, y la cortamos en trozos y la añadimos a la picadora. Los ajos los pelamos y quitamos le corazón y lo añadimos también a la picadora junto as la cebolla. Lavamos una buena cantidad de perejil y cilantro, los escurrimos y los añadimos junto al ajo y la cebolla. Picamos todos los ingredientes con el robot de cocina hasta que queden bien picaditos, y los agregamos al bol donde tenemos reservados los garbanzos.
Agregamos sal y pimienta recién molida, un par de cucharadas de comino molido y 1 sobre de levadura y removemos lo mejor posible para mezclar todos los ingredientes. La mejor forma de hacerlo bien es empleando las manos directamente, ya que así conseguiremos una masa homogénea.
Una vez hayamos amasado lo mejor posible, tapamos y reservamos en la nevera de 45 minutos y 1 hora.
Una vez la masa haya reposado y la levadura hecho su efecto, vamos a proceder a formar las falafel.
Hacemos unas bolas no demasiado grandes, como si fueran croquetas.
Batimos los huevos con ayuda de una varilla de cocina y colocamos en un plato hondo. En otro plato colocamos unas cucharadas de harina de garbanzo. Vamos pasando por huevo y por harina las bolas de falafel y las aplastamos con las manos.
Ponemos abundante aceite en una sartén a calentar y vamos añadiendo las falafel hasta que estén doradas por ambos lados, para escurrir el exceso de aceite las colocamos sobre un papel absorbente o servilleta.
Este plato podemos acompañarlo de alguna salsa como por ejemplo de Yogurt, Tzatziki, Tahini, Hummus o bien dentro de un pan acompañado de tomate, lechuga y alguna salsita a nuestro gusto. Espero que os guste.
¡ Buen provecho !
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